Cervezas belgas: clásicos de ayer, de hoy, y de siempre

Cervezas belgas: clásicos de ayer, de hoy, y de siempre

Las cervezas belgas resisten en el panorama cervecero artesanal actual

Hoy en día las cervezas belgas aguantan los envites de las cervezas artesanales de moda. En la actualidad las IPAs y sus sub-estilos copan los gustos de los adictos a la craft. Muchas de sus referencias lupuladas son ediciones limitadas, colaboraciones y suelen ir envasadas en lata. A gran distancia les siguen el resto de estilos, destacando las Imperial Stout, Pale Ale y Sour. Pero dentro de esta cotidianidad las cervezas belgas siguen acaparando la atención de muchos consumidores. La mayor parte son elaboradas por cerveceras centenarias que han aguantado a la perfección el paso del tiempo. Mientras su estilo se distancia de las líneas actuales, su consolidación sigue firme en el panorama cervecero español. En su mayor parte se trata de cervezas de alta graduación, alrededor del 9%, y del indiscutible sabor que sólo estas cervezas consiguen transmitir.

Las cervezas belgas, siempre de moda

Grandes clásicos al alcance de todos los bolsillos

Las cervezas belgas clásicas suelen rondar entre los 2,5€ y los 5€. De un precio más elevado resultan las de estilo Lambic como Cantillon, Tilquin o 3 Fonteinen. A quien no le suenan, aunque sólo sea de vista, las cervezas de la foto. Encontramos las Trappistes Rochefort, St. Bernardus, Delirium y Chimay. También La Chouffe, Gulden Draak, Tripel Karmeliet, Moinette y Orval. Todas ellas disponen de más de una referencia, diferenciándose en general según el contenido alcohólico y las maltas más o menos tostadas. Además, casi todas están disponibles también en formato de botella grande. En definitiva, más allá de las IPAs, surgirán otras novedades de estilos que se impondrán en tiempos futuros. Pero las clásicas cervezas belgas seguirán deleitando a los amantes de las craft. Su influencia parece infinita…!